El Parlamento Europeo dio luz verde el pasado mes de abril a la creación de una gran base de datos de identidad biométricos. Todo ello con el objetivo de mejorar e interconectar los sistemas de información de personas que utiliza la Unión Europea en materia de seguridad, control de fronteras y migración.
Lo que se pretende es crear una enorme base de datos biométricos y biográficos, y que esa información pueda ser recolectada por las autoridades competentes con el fin de mantener interconectados a los sistemas de control de fronteras, migración y aplicación de la ley. El objetivo más importante es que los datos sean interoperables con el fin de garantizar la seguridad.
Hoy en Tsimplifica explicamos un poco más en profundidad esta medida que pone de relieve la importancia que la biometría está adquiriendo en numerosos campos de actuación.
Repositorio de Identidad Común (CIR)
Esta gran base de datos recibirá el nombre de Repositorio de Identidad Común (CIR, por sus siglas en inglés) y busca unificar los registros biométricos de más de 350 millones de personas: huella dactilar e imágenes faciales, entre otras. Según confirma el Parlamento Europeo, esta iniciativa busca que el intercambio de datos entre los diferentes sistemas de información de la UE sea más sencillo y accesible en lo que se refiere a gestión de las fronteras, la seguridad y la migración.
Lo más novedoso es que se pretende que esta información sea interoperable y que se puedan intercambiar los datos, algo que facilitaría la función de seguridad a los guardias de fronteras, los funcionarios de migración, la policía, las autoridades judiciales, etc. El CIR permitiría el acceso de manera sistemática y rápida a sistemas de información de la UE.
¿Qué tipo de información registrará? Se busca contar con datos biométricos y biográficos como nombre, fecha de nacimiento, número de pasaporte, huella dactilar, escáneres faciales, etc. Estos datos podrán ser cruzados entre los países para poder detectar si una persona está registrada bajo múltiples identidades en las diferentes bases de datos.
Es importante destacar que esta base de datos está centrada en facilitar el trabajo a las autoridades en lo que se refiere al seguimiento de migrantes y delincuentes.
Tras su aprobación, los estados miembros de la UE disponen de 2 años para hacer efectivas estas medidas.